MECANISMOS DE DEFENSA DEL ENFERMO ADICTO

Ante la angustia (Freud, A; 1961) que produce una sensación displacentera o dolorosa surgen ciertos mecanismos inconscientes que pretenden devolver la homeostasis del aparato psíquico. Sigmund Freud se percató de los múltiples esfuerzos que hace el Yo para evitar la angustia. En general existen muchos mecanismos de defensa que surgen en circunstancias diferentes, tanto internas como externas; es decir, el Yo, para mantener alejados de la conciencia los conflictos internos, utiliza una serie de mecanismos de defensa para evitar entrar en contacto con todo tipo de emociones discruptivas.

• REPRESIÓN
• El YO detiene la entrada a la conciencia a todo tipo de pensamientos, sentimientos e impulsos que se consideran inaceptables. Por ejemplo, si una persona experimenta odio, llevará este sentimiento a la parte más profunda de su psique guardándolo celosamente de la conciencia.
• NEGACIÓN
• Es la no aceptación inconsciente de la realidad por más que los hechos sean contundentes, evitando con ello la responsabilidad de sus acciones; es también un mecanismo infantil en el que la distorsión de la realidad imporibilita la comprensión obejtiva de la situación ante el entorno. La negación se presenta principalmente en la familia, los amigos, los compañeros de trabajo y jefes, pues por más que las evidencias prueben que existe un problema con el uso de una sustancia se resisten a creer que en su familia o entre sus compañeros y amigos existe un fármaco dependiente.
• La negación está presente en el enfermo, que oculta la droga, no acepta que el consumo fue demasiado, miente acerca de dónde estuvo o que hizo a lo largo del día, y minimizan los riesgos y posibles enfermedades en las que se ve involucrado como producto de las sustancia adictiva.

RACIONALIZACIÓN Es el proceso mediante el cual el enfermo pretende justificarse asimismo para continuar con el uso y evitar el terror inherente de admitir que está fuera de control y a merced del poder de la droga. En cierta forma disminuyen la angustía, pero impiden la aceptación del problema, justificando cualquiera de sus conductas.

EVITACIÓN Es el proceso mediante el cual el enfermo se aísla para consumir, o bien consumir para aislarse de su entorno socioafectivo. Divorcia verdaderos sentimientos de su estructura conciente de personalidad, al mismo tiempo que disminuye el contacto social que tanto ha permitido y a la vez anhelado

REGRESIÓN bajo niveles muy intensos de tensión, el adicto retoma conductas inmaduras o fases tempranas del desarrollo de la personalidad; por ejemplo: la fase oral de desarrollo emocional lleva al adicto a la búsqueda de estímulos orales como el alcohol u otro tipo de sustancias psicoactivas que por esta vía produzcan placer y un alivio al dolor y a la tensión.

PROYECCIÓN en general la proyección como los otros mecanismo, es una defensa frente a fuerzas displacenteras. En este caso el proceso de defensa se origina cuando características porpias no son aceptadas debido al gran malestar que produce poseerlas. El YO, en un esfuerzo por disminuir la angustia, lo proyecta en otra persona adjudicándole dichas estructuras intolerables para el porpio YO. De esta forma, la culpa produce consumir no es aceptada como del enfermo, y se proyecta en otra persona. La otra persona es la que carga con dicha culpa y el enfermo, ahora libre de culpa y responsabilidad, se sitúa en una posición de víctima de las circunstancias, imposibilitado para tomar acciones en su recuperación. Es decir, deposita en los otros las motivaciones personales y los problemas que han empezado a surgir en torno al uso de drogas para justificarse y seguir consumiendo.